martes, octubre 21, 2008

A LA VUELTA DE ARGENTINA




Ya de nuevo en el trabajo y aunque han pasado casi dos meses de mi viaje a la Argentina, parece que aún siento la gran cantidad de sensaciones que he vivido en mi visita a este acogedor y grandioso país. Han sido 15 días en los que hemos llegado a conocer numerosos lugares donde la naturaleza ha sabido recrear su gran saber hacer. Lugares en los que me he llegado a sentir extasiado ante tanta belleza y magnitud de tan numerosos paisajes. Iguazú, un lugar donde no parece pasar el tiempo y donde, a cada paso, el visitante no parece dar crédito al espectáculo tan maravilloso que la Naturaleza le ofrece. El ruido constante de tanta agua cayendo al mismo tiempo y la neblina de multitud de minúsculas gotas de agua, acompañan al turista en su constante disparar de fotos ya que las distintas perspectivas van sorprendiendo constantemente. Buenos Aires, una ciudad enorme y acogedora, llena de barrios famosos donde existen multitud de estilos arquitectónicos, huella de tantos emigrantes de nacionalidades distintas que han contribuido a su formación. Enormes avenidas y sobre todo la mayor del mundo, 9 de Julio con su fotografiado obelisco, hacen grato el pasear por ellas escuchando por algunos rincones la música del popular tango. Bariloche, la llamada Suiza Argentina, donde paisajes de ensueño llenos de enormes picos nevados y lagos deleitan los objetivos de las cámaras y apasionan a tantos amantes de los deportes de invierno y senderistas. Calafate y el parque nacional de los glaciares, un lugar donde nuevamente la Naturaleza se ha empeñado en darnos pruebas de su gran magnitud. Auténticos ríos de hielos como el famoso Perito Moreno, destino obligado a todo visitante que llegue a Argentina, saludan a la gente con sus gemidos que retumban como truenos en el silencio del valle y al desprenderse parte del hielo que forman sus frentes. No te cansas de observar tanta belleza y se te pasa el tiempo andando por sus pasarelas construidas para ver la evolución diaria de este gigante de hielo. Navegar por el canal de los tempanos, esquivando a los icebergs mientras que los fotografías desde numerosos puntos, es otro de los paseos con que te puedes seguir enriqueciendo y aumentando el tamaño del albun. Seguimos hacia la parte más austral, la llamada tierra del fuego donde el invierno era más perceptible y la temperatura obligaba a abrigarse más. Experiencias nuevas como el montar en moto de nieve, en trineos de perros etc, nos seguían enriqueciendo y conocer nuevos lugares y seguir disfrutando de paisajes, conociendo gentes y calmando el apetito con deliciosos platos típicos han hecho que mi visita a este lugar haya sido por el momento, uno de los destinos más completo de los que hasta ahora he tenido la suerte de visitar.