IX RUTA DEL REY JAYÓN

Ayer participé en esta preciosa ruta por las sierras que forman parte del paisaje entre Llerena, Casas de Reina, Reina y Fuente del Arco. Hacía varios años que no pisaba los caminos y veredas que componen este recorrido organizado por la Asociación de Senderismo Llerenense "Astoll" y patrocinado por la Diputación. Esta era la segunda vez que se hacía en sentido inverso a los anteriores, o sea, desde la Mina de la Jayona hasta Llerena. En esta ocasión conté con la compañía de mi hermana Ana, quien tenía muchas ganas de hacerla, su hijo Jesús, que con 12 años es todo un campeón, mi padre, quien se portó a sus casi 76 años como todo un atleta de fondo y Sagrario, compañera incansable de tantas caminatas, viajes y buenos momentos. La ruta comenzó con la visita del nivel 2 de la mina, siempre me sorprende a pesar de haberla visitado en varias ocasiones, subida hasta la cima del cerro en el que se ubica y comenzamos el descenso entre olivos hasta llegar a la llamada "Capilla Sixtina Extremeña", la ermita de Nuestra Señora del Ara, actualmente está siendo restaurada para mejorar el estado de los numerosos frescos que componen su decoración interior. Terminada la visita del templo seguimos bajando hasta llegar a la rivera del Ara, una vez que la cruzamos comenzamos con la subida hasta la Huerta Pérez. Allí pasamos el primer control y nos dieron agua y naranjas para reponer un poco de fuerzas y calmar la sed acumulada. Comenzamos, después de reponernos un poco, a descender entre encinas hasta llegar a un pequeño arroyo. Seguimos ascendiendo entre un paisaje compuesto por jaras en plena floración, inundando con su aroma característico el aire que aspirábamos con necesidad por el esfuerzo. Los ojos se embriagaban con un paisaje que sólo el bosque mediterráneo puede ofrecer por estas afortunadas comarcas. Seguimos hasta llegar a la población de Reina y subimos hasta su alcazaba. A pesar del aire, disfrutamos con las magníficas vistas que, desde ella, se puede observar alrededor, por un lado la Campiña Sur y por el otro la serranía de Sierra Morena. Dejamos atrás la ermita de Nuestra Señora de las Nieves, ubicada dentro del recinto de la Alcazaba y comenzamos el descenso hasta las ruinas romanas del Regina, un teatro que aún se conserva y nos recuerda parte de su antiguo esplendor. Tomamos entre sus ruinas otro tentempié y decidimos no acceder a la sierra de San Miguel por ser una parte más dura y tomar la ruta alternativa de la campiña para terminar en la Plaza de España de Llerena, exactamente en el patio del Ayuntamiento. Pasamos el último control y nos obsequiaron con un palo para caminar y con bebidas, gazpacho y un bocadillo de productos ibéricos, así terminábamos con la ruta. Agradecer la excelente compañía que me hicieron pasar un día ameno y agradable, mi padre que sigue demostrando, a su edad, la fortaleza que tiene y el buen caminante que es, a mi hermana que llegó al final de la ruta como una auténtica heroína, a Sagrario que, como siempre, al final llega y por supuesto al gran campeón de la jornada, mi sobrino Jesús que aguantó el tirón sin quejarse y demostrando que promete ser todo un gran deportista, a todos gracias por deleitarme y hacerme disfrutar con vuestra presencia de esta IX RUTA DEL REY JAYÓN.